(Blogs El Correo 16-09-09)

“El tiempo que paséis aquí nos gustaría que fuera para edificar el presente juntos. Un tiempo para experimentar Europa y para aprender ya que el aprendizaje más fuerte es el de los compañeros”. De esta manera, Julia González, la vicerrectora de Relaciones Internacionales de la Universidad de Deusto, daba la bienvenida ayer a los 350 alumnos internacionales que durante el curso 2009-2010 estudiarán en Deusto gracias a distintos programas de intercambio: Erasmus, Ventanas de Cooperación Exterior Erasmus Mundos y Cátedra Unesco, entre otros.

“Pero este año aspiramos a recibir 2.000 estudiantes extranjeros. Necesitamos la internacionalización de la universidad”, destacó Juan Carlos Duque, director de Relaciones Internacionales. En este sentido, los estudiantes extranjeros, que suponen el 20 % del total de alumnos del centro académico, proceden de otros países europeos, Estados Unidos, Canadá, así como de varios países iberoamericanos. “El esfuerzo que hacemos con ellos es bien recibido. La mejor prueba de que están a gusto es que cada año vienen más alumnos que actúan como embajadores”, señala Duque.

En la ceremonia de recepción, estuve hablando con tres estudiantes de diferentes países y esto fue lo que me contaron sobre la experiencia de estudiar un tiempo en Deusto.

La mexicana María Fernanda Gutiérrez de 22 años es una estudiante de Psicología que ha sido seleccionada para hacer el programa de intercambio Erasmus Mundus. Confiesa que es la primera vez que viaja a España y que le gusta su modo de vida y la personalidad de la gente. “Es una buena experiencia porque conoces gente muy interesante y además he descubierto más cosas de mí, en el sentido de que soy más libre pero tengo que ser más responsable para administrar mi dinero”, asegura.

Jean- Louis Robinson de 25 años lleva 8 meses estudiando en Deusto un Máster en Comunicación Audiovisual, Empresarial e Institucional y se quedará hasta diciembre de 2010. Comenta que lo que menos le gusta del País Vasco es el mal tiempo ya que él es natural de Trinidad y Tobago y allí siempre sale el sol. “Intento ser buen estudiante aunque a veces soy un perezoso. Pero he conseguido la beca para venir aquí, así que igual lo que hago funciona”, bromeaba. Su primer objetivo cuando termine el Máster es regresar a su país pero no descarta trabajar en España. “Me encantaría seguir aprendiendo el idioma y hacer vínculos con la gente”, afirma.

Lo que le motivó a Alexy Podesca, ucraniano de 25 años, para venir a estudiar Lengua y Traducción a España, fue la posibilidad de estudiar español, conocer la gente y las costumbres de este país. Además, expresa que el nivel de vida en Ucrania y aquí son muy diferentes. “Con una beca en mi país sólo me da para vivir una semana, en cambio, en España con el dinero de la beca puedo pagar el piso y vivir un mes entero”, señala. Añade que está preparado para vivir en el País Vasco aunque “es normal que eche de menos a su familia”.